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Vives por tu sueño o vives por tu propósito?



Quiero que pienses por un momento, por qué te levantas cada mañana? Que te anima cada mañana? Por qué a veces te levantas con gozo y otras no?

Muchas veces creemos que nuestro sueño es nuestro propósito y lo más importante en nuestras vidas.


Una gran verdad que tu sueño puede ser una de las herramientas más potentes para llevar a cabo tu propósito, pero no es la definitiva. Tu propósito va más allá de tu sueño.


El propósito de tu vida siempre va a estar ligado a dejar huella, impacto en los corazones de las personas, está ligado al dar, no al recibir; y ahí es donde tus sueños, tu marca, tu empresa o cualquier proyecto personal cobran verdadero sentido. Tus sueños no son un fin en sí mismos, son instrumentos en tus manos para mostrar a Cristo y bendecir a otros.


Cuando emprendes, no solo creas un negocio: tienes la oportunidad de generar empleo y abrir caminos para otras familias. Cuando construyes una marca, no se trata solo de vender productos, sino de levantar un mensaje que inspire, que levante la fe y que siembre valores en quienes lo reciben. Cuando trabajas en tu sueño artístico o profesional, más allá de tu éxito personal, estás poniendo tu talento al servicio de Dios y de la gente, convirtiéndolo en un canal para dar esperanza, belleza y verdad.


Tus sueños son la plataforma; tu propósito es el mensaje. Una empresa puede ser la excusa para predicar con tu ejemplo de integridad. Una marca puede ser la herramienta para mostrar que la excelencia también refleja al Creador. Un talento puede ser la puerta para tocar corazones que quizá nunca entrarían a una iglesia, pero sí escuchan tu música, visten tu ropa o leen tus palabras.


Ahí es donde todo se conecta: tus sueños nacen de tu corazón, pero tu propósito nace del corazón de Dios. Y cuando alineas ambos, tu vida deja de ser una carrera detrás de logros personales, y se convierte en un impacto eterno.


El gran problema de la humanidad es que estamos atrapados, no sabemos vivir, por eso hay millones de personas allá afuera preguntándose qué harán con su vida sus próximos 40 años, ya habiendo vivido 40.

Nunca nos enseñaron allá afuera que lo que le da sentido a nuestra vida es nuestro propósito, para que estamos aquí? y tu identidad! Saber de donde vienes y para donde vas.


Y tu padre que está en los cielos, el día que lo recibiste en tu corazón, te dio identidad y propósito.


Posees la información más importante que cualquier ser humano pueda tener, Cristo está vivo; y si no sabias cuál era tu propósito, te acabo de dar una pista! al final de cada circunstancia que vives, el intención siempre será mostrar que Cristo está vivo y que ofrece salvación y restauración a todo aquel que crea.


Te sientes desanimad@? no le encuentras sentido a la vida? Las cosas en tus sueños no van como quisieras? Te invito a que vayas y hagas propósito! Muestra el poder de Dios perseverando en fe, muestra la vida de Jesús en la humildad y la paciencia.

Aún cuando no puedas trabajar en tu sueño; puedes seguir haciendo propósito. Ve y muestra el amor de Dios a alguien, ve y escucha a alguien, ve y pide perdón, ve y sigue perseverando en fe!

Ve y predicarle a alguien, terminaras el día sabiendo que hiciste algo realmente valioso!


No necesitas que tus sueños vayan exactamente como quieres para sentirte plena; siéntete plena viviendo en propósito.


Buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas.


La vida de abundancia que tanto buscas la vivirás cuando comiences a vivir en tu propósito.


Miau,

Felina

 
 
 

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