Las mujeres que emprendemos con Dios somos soñadoras, somos mujeres que más que buscar el dinero y la fama creamos marcas, ideas y empresas con un propósito mayor! Este propósito es el que realmente nos mueve. Sin embargo, a veces nos desviamos, se nos nubla la mente y de repente sin darnos cuenta estamos persiguiendo cosas que no hacen parte de nuestros objetivos.
Esta transición es muy sutil, normalmente comienza con un pensamiento, que normalmente llega cuando en la empresa, marca o sueño algo no está saliendo cómo quieres; y es allí cuando decidimos meternos al desierto. Basta solo un click en Instagram de “voy a ver qué tal va mi competencia” y de ahí en adelante ya conocen la historia; tanto que terminamos sumergidas en un profundo desánimo que nos lleva a deprimirnos. Y Por nuestro corazón solo pasarán terremotos y vientos fuertes que acaban con un “odio lo que hago” “odio mi marca” “no sirvo para hacer empresa” “como carajos me metí en esto”
Cuando estamos en ese punto debes saber que solo una persona puede sacarnos de esa cueva libres, Jesús!
Hoy queremos invitarte a no endurecer tu corazón ante la voz de Dios cuando te llama a salir de ahí. Recuerdas a Elias? el se rindió en medio del desierto, y Dios animándole le dijo que todavía le quedaba camino por delante.
Por lo general cuando entramos en depresión creemos que hasta ahí llegó todo, eso es lo grave de la depresión, te borra tus anhelos, tus propósitos verdaderos y te miente haciéndote creer que el buen camino de tu sueño se mide en tu fama y dinero, y te lleva al lugar incorrecto a querer las cosas incorrectas.
Jesús es tu padre, es tu promesa, es Él el que aunque decidas meterte en la cueva, decide irte a sacar, te llama y te busca y así cómo a Elias le dijo, que haces metido en esa cueva? Hoy te dice a ti; “Levántate y come, porque aún te queda un largo camino”
1 Reyes 19:7-15
No dejes que el enemigo acabe con lo que Dios ya propuso para ti. No dejes que el mundo te nuble con sus mediciones de éxito. Y recuerda no estás creando marca ni empresa para hacerte famosa o millonaria, estás creando marca para que el mundo entero conozca el nombre de Dios! Aférrate a tu verdadero propósito!
Miau,
Felina
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