1. No te levantes corriendo
Trata de levantarte con buen tiempo de ventaja para que tengas tiempo de procesar lo que viene. No comiences el día con afanes! Deja que tu mente y alma procesen libertad, paz, amor mientras te preparas en la mañana y sales de tu casa.
2. ORA (la oración puede cambiar tu día completamente)
3. Desayuna! Aunque no lo creas el hambre trae mal humor.
4. Mientras te preparas para salir.
Reconoce diariamente, date cuenta día a día que tienes a Jesús! Y si lo tienes a Él, en realidad lo tienes todo! No lo des por hecho, reconoce esto cada mañana. Piénsalo! Medítalo, que te de vueltas en la cabeza mientras pasa tu tiempo de salir de la casa, piensa cómo tener a Jesús en tu vida, te ha llenado y te seguirá llenando.
5. No es de ti, tener el control. Cédelo a Dios antes de poner un pie afuera. Y prepárate cada mañana, entra en una actitud de recibir el día tal y como venga. Por que ya Dios sabe lo que pasará.
6. Planifica rápidamente y prioriza tus tareas del día.
7. Léete un capítulo de proverbios o un salmo antes de dormir. Estos dos libros no son difíciles de leer en tu preparación para dormir y descansar, y no requieren tu máxima concentración ya que son versículos ligeros pero potentes! Te dan seguridad, te recuerdan quien es tu padre ( salmos). Y te muestran en la persona que te estás convirtiendo y en la que definitivamente no quieres ser (Proverbios)
8. Y por último, SUEÑA! para Dios no hay nada imposible!
Miau,
Felina
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